Capítulo 10

Me desperté sobre las 9:30. Por poco me caigo de la cama. Me giré y me encontré a Carlos, a mi lado. Me levanté y me quedé mirándole. Se veía tan mono. Me acerqué a él. Le cogí un mechón de pelo y se lo puse detrás de la oreja. De repente se giró y me separé de él. Por poco se despierta. Salí de mi cuarto y desayuné.

-Buenos días dormilona-dijo María V tocándome el hombro

-Muy buenas-

-¿Cómo has pasado la noche?-

-Bien. ¿Qué hace Carlos aquí?-

-Te explico. Te desmayaste, Carlos te cogió para que no te cayeras, te tumbó en un sofá, intentaba despertarte, tenía un estrés que te cagas y...-no le dejé terminar.

-Un momento, ¿has intentado decirme de que yo a él le importo?-

-Ya te vas dando cuenta-

-Voy a prepararle un café con unas tostadas-

-¡Olé mi niña!-

Abrí la puerta de mi habitación y puse una bandeja con café, unas tostadas y bollería en la mesita.

-Carlos-susurré

-Cinco minutos más-

-Despierta dormilón-dije apartándole el pelo de la cara

Carlos se despertó con una cara de zombie.

-Buenos días-dijo levantándose de la cama

-Pero no vas a desayunar-

-Claro, lo siento, no debería haber venido a dormir contigo-

-Carlos, no pasa nada-

-Te dejo con tu intimidad-

-Carlos-dije cogiéndole de la mano-Gracias-

-No ha sido nada-

-Claro que si. ¿Yo te importo?-

-Mucho, si te mueres me muero-

-Carlos, no te vayas-

-Me tengo que ir, los chicos me esperan-

-No te vayas de mi vida-

Carlos se quedó inmóvil.

-______, nunca me voy a ir de tu vida-

-Desayuna y hablamos-

-Vale-

{…}

Me asomé a la ventana. Estaba en braguitas, aunque a mi me daba igual. Solo llevaba una camiseta larga. Se me veía un hombro con el tirante del sujetador. Carlos no llevaba camiseta. Me abrazó por detrás. Me giré y le abracé. El me abrazó y me dio un beso en la frente.

[Narrado por Carlos]

_____ se asomó a la ventana. Estaba sexy, para que engañarse. Estuvimos hablando de nuestra vida. Entonces, me llamaron los demás para ensayar.

-Bueno, me tengo que ir-

-Vale, cualquier día iré a visitarte-

-Venga, adiós-

-Espera Carlos, la camiseta-

-Ah, es verdad-

-Venga, te la pongo que me hace ilusión-

Le puse la camiseta y le toqué un poco el vientre. La verdad es que no había mucho que ver. Tampoco estaba tan mal. Estaba genial, para que engañarse. Y entonces se fue. Creo que estoy enamorada de él.

{…}