Capítulo 18

Narro yo

Fátima salió y nos fuimos andando. Hacía aire y llevaba una camiseta de palabra de honor. Carlos vio que tiritaba y se acercó a mi lado. Me abrazó y así fuimos todo el camino hasta que llegamos a un bar decente. Nos sentamos fuera y pedimos unas coca colas. Carlos se sentó a mi lado. Seguía sin entender porque se sentaba a mi lado. Pero me daba igual, porque yo sentía algo por él.

Narra Fátima:

Vi a _____ y a Carlos abrazaditos. Me dio envidia. Ellos parecían hacer una buena pareja, aunque no lo eran. De repente sentí unas manos que tapaban mis ojos lentamente.

-¿Quién soy?-

Toqué sus manos y me recordaban a alguien. Eran unas manos suaves y cálidas. De repente me di cuenta de quien era.

-¿Niall?-

-Qué lista que eres ¿Cómo me has descubierto?-

-Soy muy buena en estas cosas-Niall se rió.

Todos se quedaron mirando. Me di cuenta de que no lo conocían. Y se lo presenté.

-Se llama Niall, lo conocí paseando a mi perro, esta misma tarde-

-Con que no tienes novio, ¿eh?-dijo Encarni

La miré con cara de fusilo.

-Es solo un amigo joder-dije muy avergonzada.

-Vale, vale, no te enfades-dijo Selena

-Te he visto en el concierto-

-¿Ah si?-

-Cantas muy bien-

-Gracias-

-De nada-

-¿Vienes conmigo a dar una vuelta?-dijo con una rosa en la mano.

Me sorprendí bastante.

Maria V empezó a reírse y _____ le dio una patada debajo de la mesa.

-Eh...si-

-Vamos-dijo Niall cogiendo mi mano

Me levanté de la silla y por poco me caigo. NO se que gilipolleces hago cuando me enamoro.

Narra David:

Vi a ese tal Niall invitando a Fátima a pasear. ¡No me lo explico! ¿Qué cojones hace ese tío metiéndose en la vida de los demás? Que salga de ahí y haga su vida como todo el mundo.

Narro yo:

Niall pidió a Fátima a dar una vuelta. Creo que es un chico muy majo y que una buena persona así se merece a alguien como mi hermana.

-Perdona, ¿quién cojones era ese?-dijo David muy enfadado

-Y a ti que te importa-

-Mucho, y ella y yo haríamos una buena pareja-

Nos quedamos todos mirándonos, los unos a los otros. Incluida María V, que se quedó atónita.

{…}